Xin chào Hanoi !

Después de un largo viaje de 48h (con escalas en Doha y Bangkok), llegamos por fin a Hanoi. Era temprano por la tarde y tomamos un bus hasta la estación de tren en el centro. Allí utilizamos Uber para llegar a casa de nuestros anfitriones. Uber fue la primera buena sorpresa al llegar a Hanoi, pues al no tener que negociar los precios, pagamos lo mismo que los locales 😛

Para nuestra sorpresa, encontrar alojamiento con CouchSurfing fue de lo más fácil, con sólo 10 peticiones, 4 respuestas positivas ! Así que pudimos elegir 😛 fuimos a casa de Quyet y Quynh, un poco alejados del centro, pero la charla con ellos, los consejos y su ayuda lo compensan con creces !

Primeras sensaciones

Lo primero que nos impactó de Hanoi… el tránsito ! Nunca habíamos visto tanta moto junta y todo el mundo parece regirse por la misma regla : anarquía ! Pero poco a poco comprendemos que dentro del desorden hay un orden, y que cruzar la calle no es tan difícil como parece… basta con no apreciar tu propia vida… hahaha

La verdad es que hay que vigilar, pero basta con no hacer nada brusco para que todos puedan anticipar tus movimientos y adaptar su trayectoria. Cada uno mira delante y se adapta. Si te paras de golpe mientras cruzas o te hechas para atrás, aquél que había previsto pasar por detrás tuyo chocará contra ti o te esquivará provocando posiblemente un accidente. En Hanoi (Vietnam en general) el transporte público funciona bastante bien, así que siempre nos desplazamos en bus.

Templo de la Literatura

El primer día por la mañana fuimos a visitar el Templo de la Literatura, al oeste de la cuidad. Un templo dedicado a Confucio cuya construcción empezó el año 1070 y en el que no se han hecho muchas modificaciones a lo largo del tiempo.

Info : UN TEMPLO NO ES UNA PAGODA. En Vietnam, en los templos (Den) no se veneran divinidades, sino que son dedicados a los “genios” de la ciudad, es decir, a aquellas personas ilustres por su devoción hacia la ciudad o la nación. Las pagodas (Chua) son consagradas a Buda, y acogen a los practicantes. A veces, los monjes viven en las pagodas. Dentro de los templos, los hay dedicados a Confucio (Van Mieu), el pensador chino.

Al principio, el templo recibía los príncipes y los hijos de los mandarines, y se les enseñaba el pensamiento y la moral confuciana. En el siglo XV, el colegio se democratizó y se admitían los mejores alumnos de todas las provincias que superaban los 4 concursos, sin importar que fueran de origen popular.

Durante la visita, es bueno tomarse su tiempo para conseguir momentos de tranquilidad. Los grupos de turistas están por todas partes, y lo mejor es esperar y dejarlos pasar 😉

Pagoda del Pilar Único y Templo Quan Thanh

Nuestro paseo nos llevó a ver la Pagoda del Pilar Único, una pequeña pagoda que reposa sobre un solo pilar de hormigón (antaño de madera). Es único en el mundo, ya que su estructura, inspirada en la flor de loto, no ha sido replicada en ninguna otra ciudad del mundo. Lo que ha llevado a esta Pagoda a convertirse en uno de los iconos de la ciudad de Hanoi.

Un poco más al norte, visitamos el templo Quan Thanh, un templo taoísta del siglo XII dedicado a Tran Vo, Guardián del Norte. Es bonito, pero nada más, aunque permite escaparse de la agitación de las calles.

Alrededores del Mausoleo Ho Chi Minh

Vietnam es oficialmente un país comunista. Además de la hoz y el martillo que están por doquier, algunos monumentos muy… comunistas nos lo recuerdan, por si no nos habíamos dado cuenta. Entre ellos, el mausoleo Ho Chi Minh, muy austero, y que no visitamos (pasear al paso alrededor de un cadáver no nos interesa demasiado…) o la asamblea nacional con su magnífico estilo «OVNI».

Y justo al lado tenemos el Palacio Presidencial, con un estilo rompedor…

Lago Hoan Kiem

Cuenta la leyenda que Lê Loi, emperador, héroe nacional y fundador de la dinastía de los Lê, recibió de un pescador una espada para ayudarle en la lucha contra los chinos. 10 años más tarde y habiendo salido victorioso, una tortuga lo abordó cuando cruzaba el lago, reclamándole la espada en nombre del Rei-Dragón. Lê Loi comprendió entonces que la espada era una herramienta divina que debía devolver al haber terminado su función. De vez en cuando se puede ver una tortuga en el lago, y los vietnamitas dicen que es la tortuga de la leyenda.

El lago ofrece un espacio agradable para pasear enmedio de la ciudad. El puente lleva a una pequeña isla con un templo, que no vale la pena visitar, pero la vista del lugar nos encantó.

Puente Long Bien

No se trata de un puente particular, pero impresiona ! Su estructura es de hierro y madera, y sobrevivió a los bombardeos durante la guerra. Los dos carriles están separados por la vía de tren y todo tiembla con el paso de las motos. Además el hormigón del suelo está agrietado y tiene agujeros… Un poco de miedo la verdad ! Pero las vistas son buenas, no parece que estemos en Hanoi !

Teatro de marionetas acuáticas de Hanoi

Las marionetas acuáticas se caracterizan por su mecanismo subacuático e invisible para los espectadores. La obra presenta la cultura y el modo de vida de la gente en Vietnam. Música y voces en directo. No es algo increíble pero vale la pena descubrirlo 🙂 Recomendamos no ir después de comer, pues a nosotros nos entró el bajón y casi nos dormimos 😛

Hanoi y sus calles

Como de costumbre, nos gusta perdernos por el centro, en el barrio de los 36 gremios, donde cada calle estaba especializada en la producción y venta de un producto. Hay mucho movimiento, casas preciosas, mucho tránsito, las aceras invadidas por las motos/puestos de comida con sus taburetes de plástico azules… Todas las viviendas tienen una puerta de entrada grande y se puede ver a la gente en su salon al lado de sus motos/coche ! Las casas no hacen tienen más de 3 o 4 metros de ancho y a menudo tienen 3 o 4 pisos, y sin seguir un estilo en particular con las adyacentes…

El último día tomamos un tren por la noche que nos llevó de Hanoi a Sa Pa, al norte del país ! Más artículos coming soon !